La juntera jeltzale Arantza Rojo ha denunciado
que “el ante-proyecto del Partido Popular es un paso atrás incomprensible sobre
un tema en el que se logró un amplio consenso en su día”.
Las Juntas Generales de Gipuzkoa han celebrado hoy
una sesión plenaria monográfica sobre el ante-proyecto de Ley del aborto del
Gobierno español. La juntera de EAJ-PNV Arantza Rojo ha señalado que “el tema objeto de
debate es un tema muy importante, un debate que está a flor de piel en la
sociedad y que tiene que ver con los derechos humanos”. Sin embargo, la
procuradora jeltzale ha criticado la idoneidad del foro empleado para debatir:
“Debate sí, pero eficacia también. Y todos somos conscientes de que para hacer
un pleno monográfico como éste, sobre un tema sobre el que ni las Juntas
Generales ni la Diputación tienen competencia ninguna, son necesarios una serie
de recursos económicos y técnicos, que no son compatibles con la apuesta por la
eficacia y la rigurosidad en la gestión pública. Sobre todo, porque el tema está en fase de ante-proyecto y
porque en el Congreso de los Diputados, allí donde se va a debatir, todos los
grupos aquí presentes tenemos representantes”.
Del mismo modo, Arantza Rojo ha recordado
que “EAJ-PNV votó a favor de la ley de plazos de 2010, porque entendíamos que
evitaba malas prácticas y abusos, y porque posibilitaba a la mujer ser agente
de su propia vida sin que la decisión la tomaran terceros. Era necesario buscar
la mejor regulación posible, una regulación basada en la realidad y buscando el
mayor consenso posible. Esto es, se trata de regular hechos para defender
derechos”. En este sentido, Rojo ha denunciado que “el ante-proyecto de ley del
Partido Popular es un paso atrás incomprensible sobre un tema en el que se
logró un amplio consenso en su día. Por eso, no parece lógico reabrir una
cuestión socialmente resuelta, encauzada, sino es por oportunismo político o
por alguna otra intención”.
Asimismo, la juntera de
EAJ-PNV ha asegurado que “Este
retroceso va a llevar a muchas mujeres a interrumpir su embarazo de manera
clandestina, creando un problema de salud donde no lo había. Las restricciones
no terminan con los abortos, simplemente los hacen más injustos. Contribuyen,
además, a perpetuar las desigualdades entre ricos y pobres. Con medios irán a
sitios en que se les practique con garantías, pero sin medios, tendrán que
recurrir a prácticas clandestinas con riesgos para su salud”. Por eso, en
opinión de Arantza Rojo,
“el énfasis debería estar en instaurar políticas y programas que consigan la
reducción de los embarazos no deseados: políticas de educación sexual, de acceso a información y a métodos
anticonceptivos, políticas que no abran mas la brecha entre los diferentes
niveles socioeconómicos, políticas de igualdad efectiva, medidas de apoyo a la
familia, etc.”.
Además,
Rojo ha destacado que “la ley dejará al Estado español a la cola de Europa en
esta materia” y ha denunciado que “es un
paso atrás en el avance hacia la consideración de las mujeres en
igualdad o como sujetos capaces. Una vez más plantea tratar a las mujeres como
menores de edad y que sean los médicos, los forenses o los jueces quienes vayan
a decidir sobre su maternidad. Esta ley impide a las mujeres ser agentes de su
vida, además de tratar a la mujer como un ser inferior que no debe tener
capacidad para decidir”.
Por último, la juntera jeltzale ha señalado que “la legislación debe servir
para garantizar derechos, para mejorar la vida de las personas, no para imponer la ideología del partido que
gobierne”.
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